Sólo tenemos que exponer unos instantes nuestro iPad, iPhone o iPod touch a los más pequeños para darnos cuenta de lo atrayentes que resultan. Con una cantidad de contenido adecuado y enfocado, del cual ya hablaremos, se abre un amplio abanico de entretenimiento y educación en forma de aplicaciones. No obstante, debemos saber el peligro que conlleva el uso de dichos dispositivos para ellos o para nuestras cuentas, ya sean de redes sociales como Facebook o Twitter, para el correo electrónico Mail e incluso en la cuenta bancaria.